Montaña de los Pirineos:

 

Está claro, que originariamente el Mastín de los Pirineos es la raza de alguien como yo al que le gustan los molosos de montaña y es aragonés y pirineista. Pero por supuesto, a un enamorado de los Pirineos y de los perros de montaña, le tiene que gustar e interesar el otro gran moloso pirenaico, el perro de la vertiente francesa, el Montaña de los Pirineos, el gran Patou.

Lo cierto, es que nunca he tenido un montaña de los Pirineos, pero si que tengo cierta experiencia sobre la raza porque he visto muchos montañas a lo largo de mi vida tanto en la vertiente meridional como en la vertiente septentrional de los Pirineos, he realizado pruebas a algún ejemplar, conozco a varios propietarios de montañas y por supuesto he leído bastante sobre la raza.

Libros y revistas españolas y francesas sobre el Montaña de mi propiedad
 

De nuevo estamos ante un moloso de montaña que defiende rebaños de los depredadores en la cordillera de los Pirineos.

Históricamente y sobretodo en Francia, se le ha llamado “Patou” o “Gran Patou”. Los anglosajones le suelen llamar “Great Pyrenees”.

Y de nuevo y no nos extenderemos en ello, estamos hablando de otro descendiente del Mastín tibetano.

Lo que está clarísimo es que Mastín y Montaña de los Pirineos eran el mismo perro, hace cien años el Mostín y el Patou eran la misma raza. En los Pirineos siempre han habido intercambios de todo tipo entre ambos lados, y en algunas cosas ha sido una cordillera permeable. Desde siempre la cordillera ha sido atravesada por ganado, animales, pastores, contrabadistas etc En verano, pastores de ambas vertientes suben sus perros a los puertos y allí lógicamente se producen cruces entre perros de ambos lados de la frontera. Realmente las diferencias han sido cosas de perreros, para los habitantes del Pirineo siempre han sido el mismo perro. Si bien los españoles impulsaron la raza Mastín de los Pirineos y los franceses la raza Montaña de los Pirineos, realmente fueron la misma raza y el Mostín es también un poquito francés y el montaña un poquito español.

Según la literatura francesa, en los siglos XIV y XV en el sur de Francia, estos grandes perros guardaban rebaños y castillos. El castillo de Foix y el de Lourdes eran guardados por estos perros.

En el siglo XVI pescadores vascos llevan estos perros a la isla de Terranova, y según algunas teorías de su cruce con retrievers negros llevados por los ingleses nace la raza Terranova Landseer.

En el siglo XVII se lleva uno de estos perros a la Corte de Versalles. Tras este hecho, la raza se pone de moda por toda la France.

En el siglo XIX y coincidiendo con el romanticismo la raza sale de los lindes pirenaicos a otros países europeos y americanos.

Ciertamente, a principios del siglo XX tanto españoles como andorranos podían tanto como los franceses, haberse declarado como países poseedores de la raza, pues había ejemplares tanto en el Pirineo español como en el andorrano y francés, pero son los franceses los que luchan por quedarse con la paternidad de la raza.
El Pastor Club nacido en Cauterets (Pirineo francés) hace en 1907 el primer estándar de la raza.

En 1923, por iniciativa de Sénac-Lagrange (considerado el padre de la raza) se crea el Club francés de la raza llamado Reunión des Amateurs de Chiens Pyrénées (RACP) que en 1927 publica su primer estándar oficial.

El Club inglés de la raza es creado en 1937.

En 1970 la RACP publica un nuevo estándar de la raza que es una mera actualización del estándar de 1927.

En 1975 la FCI adopta el estándar de la RACP aunque se modifica ligeramente en 1986.

Como casi todas las razas de montaña, el Patou pasó grandes dificultades la primera mitad del siglo XX, por la disminución de la ganadería y de la presencia de los depredadores, dificultades acrecentadas en este caso por la participación del país galo en las dos guerras mundiales.

El afijo más famoso en la historia moderna de la raza es el afijo francés “Comte de Foix”
En España la raza ha tenido cierta difusión. Entre mediados de la década de los 70 y principios de la de los 80 existen un importante número de criadores y aficionados en nuestro país. La raza despierta expectación en nuestro país y se importan perros de Francia e Inglaterra.

En la segunda mitad de la década de los 80 pasa lo que ha sucedido en muchas razas, que gente sin conocimientos con la raza, se dedica a criar y baja muchísimo la calidad.
En 1985 se crea el CEMP, Club Español del perro de Montaña de los Pirineos y ese mismo año se celebra en Madrid la primera monográfica de la raza.

Pero a principios de los 90, el nivel de la raza es muy bajo en España, con perros sin carácter, cabezas poco típicas, problemas de pelaje, poca alzada y masividad etc.

Posteriormente gracias al trabajo de algunos aficionados y criadores, la cosa empieza a mejorar y se comienzan a importar de Francia ejemplares de calidad y así en 1995 Ics Du Val de Lavedan, de Albert Muntadas gana la abierta de machos en una monográfica en Rabastens (Francia).

 Según dicen bastantes criadores españoles de Montaña, la situación de la raza es buena, aunque aún siguen faltando bastantes cosas como una mayor alzada y estructura en muchos ejemplares y se sigue estando a un nivel inferior del que hay en Francia.

De todos modos, la raza sigue teniendo cierta presencia en España, el CEMP sigue haciendo su monográfica anual y además tienen una excepcional web que les recomiendo visitar (www.cepmp.com) , realmente mucho mejor que la del Club del Mastín de los Pirineos de España, pero es que claro, en la web de este último tienen a Dieguito Galán. Veamos los LOE en los últimos años:
 

1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004
315 182 150 116 138 146 97

 

Aparte de estos datos, hay que decir que existen un buen número de ejemplares sin pedigrí. De todos modos, el descenso de ventas es evidente, en 1985 hubo 380 inscripciones, en 1987 475, en 1989 522, en 1991 510 o en 1993 425. Cifras muy altas comparadas con esos escasísimos 97 en el 2004.

En España ha salido mucha información en revistas sobre la raza y hay dos libros en español de Hispano Europea y uno de Tikal. Por supuesto en Francia hay gran cantidad de libros sobre la raza. En cuanto a afijos españoles destacan “ De Tavertet”, “La Borda d´Urtx”, “L´Oronet” ,” De Alba de los Danzantes” o “Torre de Justo” entre otros.

Pero dejémonos de rollos, y voy a dar mi opinión sobre la raza. El montaña de los Pirineos es un perro tremendamente hermoso. A los fans del montaña les encanta la frase de “Es una de las razas más antiguas del mundo y la más bella de todas”. Entre sus peculiaridades, el doble espolón y su famosa “expresión pirenaica”.

El Montaña, un perro indudablemente bello
 

Podemos observar evidentes diferencias con el Mostín. En general el perro español es más rústico, más grande, más imponente. Por el contra el perro francés es más elegante y refinado. El Mostín es un moloso puro y el Montaña es un lupo molosoide.

Foto que tomé a un Montaña que cuidaba un rebaño en el alto valle D´Ossau (Pirineo francés). Muchos de los Montañas que nos encontramos en la alta montaña, no son tan bonitos como las líneas de belleza

 
El Mostín es en general un perro más poderoso, con más hueso, más estructura. Suele ser de mayor alzada aunque eso depende del ejemplar. La cabeza del Mostín es más grande y poderosa que la del Montaña.

Cabeza de un Montaña, más fina y lobuna que la del Mostín. Los montañas no suelen babear, muy al contrario que los Mostines

 

El Montaña tiene la gran ventaja sobre el Mostín de que es un perro que no suele babear al contrario que el moloso aragonés. Por el contrario el montaña tiene la tendencia de escarbar y algunos dejan los jardines de sus propietarios como campos de excavación.

Podíamos seguir contando diferencias pero creo que es innecesario, en la actualidad existen evidentes diferencias físicas entre las dos razas.

Pero vamos de una vez a lo que más interesa, que es el tema carácter. Al Montaña lo siguen vendiendo como un guardián insobornable e incorruptible. Lees en revistas, libros o webs a los criadores de montaña y lo ponen como un superguardián, y en muchas ocasiones dicen que es un perro territorial y muy desconfiado, vamos que lo venden como si fuera un Cáucaso. Siempre ha habido mucho pique entre la gente del montaña y los mostineros. Cuando hablas con la gente del montaña, te suelen despreciar al Mostín en cuanto a carácter y recalcan que el montaña es muy superior. Los mostineros suelen decir “ es que el montaña es un perro muy traidor, son impredecibles, te atacan por detrás”.

El caso, es que yo he visto e incluso tengo grabado en video a muchos Montañas en guarda, y afirmo rotundamente que salvo alguna escasa excepción, son también absolutamente inútiles para la guarda y custodia de fincas, otro timo como muchas otras razas en este sentido. Y los he visto tanto en el Pirineo español, como en el francés, como en prestigiosos criaderos, incluso vive alguno en mi urbanización, y desde luego como perro para guardar una finca o un chalet no vale un carajo, yo jamás le recomendaría a una familia un montaña como perro de guarda.

Y es que por mucho que digan , se llevan tres pelos con el Mostín. Realmente no son especialmente territoriales y en general para nada son desconfiados, muchos además son bastante inseguros, al igual que muchos Mostines. Tampoco son especialmente expresivos para disuadir .Y lo siento decir pero contra las personas, al igual que sus hermanos los Mostines, suelen ser cobardes, ya que son perros que en su mayoría no responden a una agresión o provocación, vas a por ellos y se suelen acojonar o recular. En general, repito se nota que tienen un pasado común con el Mostín, y muchas reacciones son muy parecidas. Si que hay dos claras diferencias con el Mostín, una es que son aún mucho más independientes, en mi opinión en exceso, prefiero un perro como el Cáucaso más apegado al dueño. Y la otra diferencia es que son claramente más nerviosos que los Mostines, en esto si que se puede observar una evidente diferencia.
Ya digo, que he realizado alguna prueba de guarda a montañas con resultados nefastos. Pero es que encima el 25 de septiembre del 2005, me acerqué a Sabiñánigo (Huesca) a ver el TAN, un test de aptitudes para el perro de montaña de los Pirineos, test que se hacía encuadrado en el fin de semana de la raza. Ya me habían dicho que el test era muy light , pero lo que ví allí, me dejó anonadado y estupefacto. Resulta que era un test en el que primero el perro va andando con su dueño, y se para entre un grupo de personas que le rodean, y se tiene que dejar tocar y acariciar, vamos ser manoseado para demostrar sociabilidad. Todos se dejaban toquetear sin problemas porque no son desconfiados. Pero señores del montaña, ¿qué coño están haciendo?, pero no dicen que su perro es superdesconfiado con los extraños y lo venden como tal. Pero entonces porque comienzan su test con una prueba en la que el perro tiene que demostrar lo contrario a lo que propugnan, que incongruencia señores. Yo no sé como aún se extraña la gente de que no haya casi perros con cojones, estas cosas demuestran todo. Porque no me dirán que es que sus montañas son muy sociables fuera de casa y desconfiados en su territorio, oigan , que los he visto en su territorio y tampoco, que no suelen ser desconfiados. La prueba sigue y el perro pasa delante de otros perros que le ladran para ver como reacciona, y luego echan unas objeto al suelo a ver si se asusta. Pero es el desenlace de la cuarta y última prueba del test lo que me hace ya llevarme las manos a la cabeza. En ella, simplemente va un tío y abre un paraguas en las narices del perro. Y eso es ya la hostia, la mitad se iban detrás acojonados, y otros, los menos malos permanecían indiferentes, pero sin mostrar agresividad. Pero por favor, un verdadero perro de guarda va con su dueño y alguien les hace un gesto tan brusco como abrir un paraguas y el perro tiene que atacar. Hasta admito que en un primer momento se asuste o desconcierte por la sorpresa o el sobresalto, pero por favor, un verdadero perro de defensa al segundo siguiente tiene que atacar, o por lo menos mostrar hostilidad.
 

Montaña huyendo despavorido ante el paraguazo

De verdad que en esto de los perros, se ve cada cosa que flipas. Un buen Cáucaso, le hacen esto y es que se come el paraguas. Y entre un montón de Montañas no hubo ni uno que por lo menos ladrara o gruñera al del paraguas.

Je, je otro Montaña en fierísima expresión ante el malvado agresor del paraguas

La verdad, es que cualquiera que sepa un poquito de perros, ve ese test y no le queda ninguna duda de que los montañas son en su mayoría cobardes, inseguros, y poco desconfiados, o lo que es lo mismo, un cero patatero para guarda y defensa.

Pero al César lo que es del César. El montaña me parece un buen perro para protección de ganado de los depredadores, y eso lo ha demostrado ampliamente. Y es que un perro para protección de ganado no tiene nada que ver con un perro para guarda y custodia de fincas, un perro puede valer para proteger un rebaño pero no valer para guarda y defensa como explicaré en el artículo 2.32.

Para proteger el ganado de los depredadores, un perro tiene que tener cierto poder disuasorio, cierta combatividad y agilidad y resistencia física. Y todo esto si que lo tienen muchos montañas, y en eso un montaña si que es claramente superior a un Mostín o a un Mastín español de líneas de exposición. E incluso para esto puede ser más adecuado que un Cáucaso como detallaré en el artículo 2.32 porque un Cáucaso puede ser un perro excesivo para la situación actual de las montañas españolas.

Un Montaña suele tener un perro de 50-55kg o como mucho 60kg (hay ejemplares de aún más peso pero no es lo normal), y eso es un peso ideal para un perro para protección de ganado. Con ese peso un perro es ya grande y disuasorio pero no es un mastodonte torpe como otros perros de 80kg o más. Un buen montaña es un perro bastante ágil, rápido y con buena resistencia física, y dotado de cierta combatividad. Y el montaña realmente ha demostrado su eficacia en estas lides. Dentro del programa Life, se han reintroducido osos en los Pirineos( ya hablaré de ello en el artículo 2.33). La Generalitat de Cataluña eligió al CEPM, como gestor y controlador de ese programa, se regalaron varios montañas a ganaderos y pastores y dieron buenos resultados.

En 1986 se publicó en USA en el número 588 de la revista del Departamento de Agricultura un estudio diferencial sobre PPR (Perros Protección de Rebaños).

Ese estudio se hizo con Montañas, Komondors, Akbashs, Anatolias, Maremmano Abruzzese, Sharpei y Kuvasz. El Montaña quedó el segundo de la prueba con un 71% de efectividad sólo por debajo del Anatolia que dio el 77%. Es de reseñar que en esta prueba no intervenían Cáucasos, Asias o Mostines. Pueden encontrar más información de estos dos últimos puntos en la repito que bastante buena web del CEPM.

Y de hecho el montaña es un perro utilizadísimo en USA como guardián de rebaños, según el libro “Livestock Protection Dogs”, hay 80000 montañas ejerciendo esta función en USA, no olvidemos un país en el que aún quedan en muchas zonas lobos, osos, coyotes, pumas y otros depredadores.

Eso si, aún veo un perro mejor que el montaña para esta función, el Asia Central. Realmente son perros parecidísimos en carácter, es más, un Montaña se parece más a un Asia Central que a un Mostín. Los dos son muy independientes y por mucho que digan los fans del Montaña, poco desconfiados con los extraños. Pero el Asia es mucho más potente y muy superior combatiendo.

Pero bueno, a falta de Anatolias o Asias, el Montaña es el mejor perro que tenemos en nuestras montañas para defensa de ganado, quizás junto a algunos Mastines Leoneses de enclaves rurales.

En resumen, el Montaña de los Pirineos o Patou, un perro muy bonito, bastante independiente, nulo como perro para guarda y defensa pero excelente como perro de protección de rebaños.

MARCO